6.1.6 Actitud y carácter

Versión 1.0 Enero de 2019 ( Versión anterior )

Martin Luther King (1929-1968 d. C., ministro cristiano estadounidense y activista por los derechos civiles) declaró (el 28 de agosto de 1963) que soñaba con el día en que una persona sería juzgada no por el color de su piel, sino por su carácter. ¿Qué significa carácter en este contexto?

El sufrimiento, tanto en los demás como en nosotros mismos, surge de circunstancias que escapan a nuestro control y de las decisiones que tomamos. A pesar de las enseñanzas del Buda, no podemos evitar todo el sufrimiento. Los desastres naturales, los accidentes, las enfermedades, etc., seguirán ocurriendo. Incluso sin un sufrimiento significativo, todos enfrentamos problemas en la vida, en nuestras actividades diarias.

Pero nuestro comportamiento y nuestras elecciones de valores en estas circunstancias están fuertemente influenciados, si no determinados, por nuestros impulsos físicos, el grado de nuestro altruismo evolutivo, nuestras capacidades físicas y mentales, la situación social y las presiones de la vida en general.

Lo que importa es cómo respondemos a estas influencias y presiones, cómo reaccionamos a las cartas genéticas y ambientales que nos tocan. A menudo, nuestra reacción no puede explicarse por la ciencia ni por nuestra historia personal, incluso si son coherentes con ellas.

Estas elecciones reflejan nuestras actitudes fundamentales ante la vida y demuestran nuestro carácter personal.

Si pudiéramos explicar sus reacciones con base en la ciencia y su historia personal, entonces no habría nada misterioso en los resultados. El carácter es algo misterioso, un reflejo del espíritu humano que, hasta la fecha, está (todavía) más allá de nuestra comprensión. Es, en cierto modo, como el dios de los vacíos , dependiente de nuestra actual ignorancia de la ciencia y la historia, pero confiamos en que seguirá siendo así durante mucho tiempo, por lo que esta elucidación del carácter y la actitud resulta útil ahora.

Tu carácter no son los simples atributos de tu comportamiento adquiridos por la suerte de tu nacimiento o por experiencias afortunadas. No puedes atribuirte el mérito de lo que pueda explicarse como una consecuencia natural de tus circunstancias.

â—�       Si naces sano y con una inclinación intelectual, en una familia que valora la educación y puede enviarte a una buena escuela, entonces todos podemos estar contentos cuando logres graduarte de la escuela secundaria, o decepcionados si no lo haces, pero porque no fue difícil (por hipótesis) no es evidencia de un carácter sobresaliente.

â—�       Por otro lado, una persona tal vez con una discapacidad o sin hogar, que lucha un poco intelectualmente, pero quiere los beneficios de la educación y trabaja duro para lograrlo, merece más elogios cuando se gradúa, y tal vez más simpatía si no puede: ha demostrado una actitud admirable hacia la vida y hay evidencia de un carácter persistente y trabajador.